29/03/2020 - ¿Realmente os preocupa esto?

Candel hace un resumen de todas las denuncias que ha recibido a causa de "sus formas":

Llamó hijo de puta y cabronazo al Doctor Osuna. Fue multado con 5000€ pero a cambio quedaron en evidencia en sede judicial todas las tropelías que cometía este señor.
Llamó tonta del culo a la jefa de hostelería del hospital clínico, por poner en marcha todo un complot para intentar dejarlo como machista y acosador ante la opinión pública. Fue multado con 5000€ y se demostró en sede judicial que todo lo que orquestó era mentira, además de descubrirse que consiguió su puesto a dedo.
Llamó tonta del culo a la doctora Magdalena Palomares por acosar a un paciente mayor de edad diciéndole que NO podía hacer un vídeo criticando el sistema sanitario. No se le condenó a Candel por aquellas palabras.
Llamó hija de puta a la ex-presidenta de Andalucía, Susana Díaz, por hacinar a pacientes oncológicos en barracones y entorpecer su tratamiento a base de recortes en sanidad. Fue multado con 3000€.
Llamó hijo de puta al jefe de la Fiscalía de Granada, por no investigar y terminar archivando graves delitos de prevaricación y malversación de fondos en la sanidad pública de la provincia, habiendo sendos informes de la Guardia Civil y la Policía Nacional demostrando que algo olía mal. Fue multado por 2000 y pico euros.

Todas estas denuncias, salvo la del Dr. Osuna y Dra. Palomares, están recurridas. Así que no son firmes todavía, ya se verá por donde terminan saliendo.
Aquí lo que ocurre es que hay muchos que no pueden soportar que el dinero para pagar dichas multas ha sido puesto por todos los ciudadanos que le seguimos, en una colecta. Porque los que le apoyamos sabemos que todo este camino tenía un costo: él ponía la cara para que se la partiesen, y nosotros poníamos el dinero para evitar que lo esquilmasen.
Además, TODOS los expedientes que le abrieron no solo han sido archivados, sino que además se han abierto diligencias contra algunas personas por acoso y prevaricación contra Candel.
¿Realmente os siguen preocupando las formas de este señor? Porque a él es precisamente lo que menos le importa. Aquí de lo que se trata es de defender el DERECHO de los ciudadanos a utilizar la única arma que no mata, pero que pone a cada uno en su lugar: el lenguaje soez y vulgar.